Jornadas alegres

25,00 IVA Incl.

SKU: 9788417043988 Categoría:

Detalles del libro

Peso 0,577 kg
Páginas

288

Encuadernación

Rústica

Idioma

Castellano

ISBN

9788417043988

Sobre el autor

de Castillo Solórzano, Alonso

Alonso de Castillo Solórzano (Tordesillas, 1584 - ¿Italia, 1648?). Fecundo novelista, poeta y dramaturgo, disponemos de contadas noticias biográficas sobre Castillo Solórzano. Parece que ya desde joven quiso hacer de la literatura su forma de vida, aunque para ello tuviera que enfrentarse a múltiples obstáculos y a cambiar a menudo de amo, ciudad o mecenas. Hacia 1619 se asentaría en Madrid, donde sirvió como gentilhombre al conde de Benavente y al marqués de Villar. Es también la época de sus primeras colecciones de relatos: Tardes entretenidas (1625), Jornadas alegres (1626) y Tiempo de regocijo y carnestolendas de Madrid (1627), seguidas por Noches de placer (1631) y Fiestas del jardín (1634). Después de un breve periplo andaluz (Escarmientos de amor moralizados, 1628), de otro levantino (Lisardo enamorado, 1629; Huerta de Valencia, 1629) y de un tercero catalán (Los amantes andaluces, 1633), hubo de trasladarse a Zaragoza, capital en la que escribiría Los alivios de Casandra (1640) y probablemente las póstumas Sala de recreación (1649) y La quinta de Diana (1649).

Apreciado por Lope de Vega, Juan Pérez de Montalbán y María de Zayas, su espíritu abierto y su indudable talento para la picaresca (Las harpías en Madrid, 1631; La niña de los embustes. Teresa de Manzanares, 1632; Aventuras del bachiller Trapaza, 1637; La garduña de Sevilla, 1642) lo ayudaron a adaptarse con facilidad a los variados estilos que demandaba el siglo de los Austrias menores.

Las Jornadas alegres (1626) del vallisoletano Alonso de Castillo Solórzano son una más de las colecciones de novela corta que tanto éxito editorial tuvieron en la España barroca. El marco narrativo se sitúa durante el viaje de vuelta a Madrid de tres mujeres y tres hombres: doña Lorenza, esposa de don Álvaro de Toledo, se desplaza en septiembre a Talavera de la Reina —por encargo del marido— a vigilar su hacienda, escoltada por sus dos hermanas y los dos hermanos del oidor. Llegado el invierno, don Álvaro enviará a su criado Feliciano a que los traiga de vuelta a la corte. Dicho retorno deberá hacerse despacio y atendiendo en todo momento al avanzado estado de gestación de doña Lorenza. Feliciano propone que cada día uno de ellos cuente un relato para amenizar los oportunos descansos. De ese modo, el lector se recreará con un total de seis novelitas de temas diversos, narradas a lo largo de esos cinco días de traslado: No hay mal que no venga por bien, La obligación cumplida, La cruel aragonesa, La libertad merecida, El obstinado arrepentido y la Fábula de las bodas de Manzanares.

Todas ellas son una fiel muestra de escritura rápida que combina temas de enredos, duelos e intrigas con ágiles diálogos y los tópicos más recurrentes de la prosa del siglo XVII: los malentendidos, las tretas o las revelaciones de la identidad de los personajes. 

La colección  Prosa Barroca, dirigida por el Prof. Rafael Bonilla Cerezo (Universidad de Córdoba), nació como lugar de encuentro y sala de recreación para los investigadores de la narrativa áurea y curiosos en general. Junto con volúmenes de ensayo, da a conocer en rigurosas ediciones críticas novelas cortesanas, pastoriles, caballerescas, picarescas, bizantinas y moriscas, además de las retóricas y sermones de los oradores del Seiscientos español.

Valoraciones

No hay valoraciones aún.

Sé el primero en valorar “Jornadas alegres”

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *